jueves, noviembre 16, 2006

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...pero marcha viento en popa.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Ah, pero... ¿hubo guerra? (Mi humor negro es del malo, como puedes ver)

Acojonante la viñeta. Muy conseguido ese aire carbonizado sobre la fábrica y los coches. ¡Ni que fueras de Asturias! :D

Siempre que voy por allí me entusiasmo contemplando esa estética carbonicoférrea, las grúas de la Ría, las industrias metalúrgicas... Me quedo hipnotizado y siempre me da ganas de pintarlo.

Un saludo,

j. dijo...

Pues ya que lo dices, yo he pensado en, algún día, fotografiar exhaustivamente el entorno de Avilés: la ría, Ensidesa y sobre todo, las viviendas que hay entre las fábricas; también Gijón, la Uninsa -que no sé si todavía se llama así-. Sitios terribles. Sacar el negro de la carbonilla que se acumula en las grietas, su brillo graso...

En Gijón -que es lo único que conozco medio bien- es sin embargo bonito el aspecto de los edificios de viviendas de los barrios obreros; algunos, bastantes, conservan una decoración a base de piececillas como de mosaico y azulejos, pero, con la humedad, la lluvia, los cambios de temperatura... se desprenden y caen a la calle, con lo que hay que quitarlo todo y poner otra cosa más segura; así cada vez van quedando menos. Sería bonito fotografiar eso también, a tiempo.

Si supiera hacerlo bien o aprendiese... :(

Anónimo dijo...

Acojonante viñeta, y muy bien puestos los puntos suspensivos del suma y sigue. Me tomo la libertad de recomendarla en ca Arcadi.

j. dijo...

Tómesela, por supuesto, amigo Al. (Ja, ja; espero que no excite más los ánimos ya de natural caldeados en esa casa...)

Un saludo!

Anónimo dijo...

Sí, no dejes de hacerlo. Merece la pena, antes de que los vayan restaurando y pierdan ese encanto único e inigualable.

Ya nos las intercambiarermos luego, jeje :)