Me gusta una dosis de humor gráfico cada día. En este caso, suscita ternura el comentario de los dos angelitos que se han sentido un tanto decepcionados por Dios al que imaginaban de otra manera. Es una trasposición del plano humano y casero al divino y de ahí el choque cómico, y la sonrisa que suscita la viñeta.
Sí, eso es, tenía miedo de que no se pillase... Yo no soy creyente, sería más bien un agnóstico tirando a ateo, pero saco mucho en mis viñetas a Dios, o la idea de Dios desde diferentes ópticas, porque, como digo, si no hay dios o no lo hubiese, la necesidad de creer sí de todos modos existe -voy a decir algo chocante, pero cuando un animal está agonizando, y mira a lo lejos, no ya a ti o a lo cercano y familiar, no, a algo que no está, como la salvación que haya de venir de alguna parte, ¿no es es mismo sentimiento?-, y la idea más intelectualizada de dios también igualmente existe, sea para afirmarla o para negarla, así que todo ello da pie para hablar en el fondo de nosotros...
2 comentarios:
Me gusta una dosis de humor gráfico cada día. En este caso, suscita ternura el comentario de los dos angelitos que se han sentido un tanto decepcionados por Dios al que imaginaban de otra manera. Es una trasposición del plano humano y casero al divino y de ahí el choque cómico, y la sonrisa que suscita la viñeta.
Sí, eso es, tenía miedo de que no se pillase... Yo no soy creyente, sería más bien un agnóstico tirando a ateo, pero saco mucho en mis viñetas a Dios, o la idea de Dios desde diferentes ópticas, porque, como digo, si no hay dios o no lo hubiese, la necesidad de creer sí de todos modos existe -voy a decir algo chocante, pero cuando un animal está agonizando, y mira a lo lejos, no ya a ti o a lo cercano y familiar, no, a algo que no está, como la salvación que haya de venir de alguna parte, ¿no es es mismo sentimiento?-, y la idea más intelectualizada de dios también igualmente existe, sea para afirmarla o para negarla, así que todo ello da pie para hablar en el fondo de nosotros...
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